Para los sectores más vulnerables, la Provincia destina 58 millones de pesos
[CORRIENTES]-
Por decisión del gobernador Gustavo Valdés y en el marco de las acciones del estado para asistir a los sectores más vulnerables de la sociedad, ante la crisis sanitaria y económica que atraviesa el país por el nuevo Coronavirus, el Gobierno provincial triplicó la inversión en los montos que se acreditan mensualmente a las tarjetas Mbareté.
Desde abril, los beneficiarios de la tarjeta Mbareté disponen de 1000 pesos para la compra de leche, medicamentos y pañales en las farmacias adheridas. Mientras que las beneficiarias de la tarjeta Mamá Mbareté, disponen desde ahora de 3000 pesos para la compra de alimentos durante el embarazo en los comercios adheridos. Es decir que los beneficios pasaron de 300 a 1000 pesos y de 1000 a 3000 pesos, respectivamente.
Con este aumento, el Gobierno provincial destina aproximadamente 58.000.000 de pesos mensuales para ambas tarjetas.
"Teniendo en cuenta la crisis sanitaria y económica que existe en el país por el Covid-19, esta es una ayuda fundamental sobre todo para los sectores más vulnerables de la población", dijo el Ministro de Salud Pública de la Provincia, Ricardo Cardozo.
Remarcó que esto, en el caso de las tarjetas Mamá Mbareté, "tiene una importancia significativa en la alimentación y en los controles sanitarios durante el embarazo y también, en el caso de las tarjetas Mbareté, representa una asistencia fundamental para las familias correntinas".
La tarjeta Mbareté permite a los beneficiarios la compra de medicamentos sin cargo en la red de farmacias adheridas, con un límite de monto autorizado desde este mes, de $1000. Este beneficio alcanza a las personas empadronadas que se encuentran en situación de vulnerabilidad, que no cuentan con cobertura social, y que están domiciliadas en jurisdicción de la provincia de Corrientes.
En tanto, la tarjeta Mamá Mbareté está destinada a embarazadas con cobertura pública exclusiva para la compra de alimentos específicos en comercios adheridos, por un importe, también desde este mes, de $3.000. Uno de los objetivos principales es garantizar los controles prenatales, efectuados en los Centros de Atención Primaria de la Salud y en los hospitales de la provincia, y brindar una mejor alimentación durante el embarazo.